La despedida de Thiago Correa, el menor de 7 años que recibió un disparo de un oficial de la Policía Federal Argentina, tuvo lugar en la cochería Dauria de la localidad de San Justo, La Matanza. El cortejo fúnebre pasó por el colegio Santa Rosa, al cual asistía, y el Club Defensores Unidos de la Tablada en donde practicaba fútbol.
La sala velatoria recibió a familiares y allegados desde el domingo a las 17 horas y extendió su horario hasta el lunes a las 9 de la mañana. Luego del recorrido que realizó el cortejo, en el cual se hicieron paradas para que le colocaran globos blancos, el cuerpo del niño fue llevado al cementerio de González Catán.
El menor fue víctima del accionar que tuvo el policía Facundo Aguilar Fajardo, de 21 años, quién en defensa de un asalto disparó once veces en una avenida pública, en un horario transitado. Thiago se encontraba con su padre en la parada del colectivo, a aproximadamente 180 metros de la secuencia, y recibió el impacto de una bala de plomo en su cabeza.
El viernes 6 de junio por la noche, Facundo Correa, padre del niño, comunicó el fallecimiento de su hijo. Se encontraba en el Hospital de Niños de San Justo y junto a su esposa, Diara Medina, tuvieron la difícil tarea de confirmar que Thiago Correa murió a causa del disparo.