El candidato de La Libertad Avanza logró una victoria que superó las expectativas, marcando un cambio evidente en el panorama político del país. El resultado se definió por un margen considerable, y Massa reconoció la derrota antes de que se divulgaran los resultados oficiales.
“Hubo dos proyectos de país. La jornada de hoy ratifica que la Argentina tiene un sistema democrático transparente y sólido, que respeta siempre los resultados”, declaró Massa, reconociendo la validez del proceso electoral. El ministro de Economía, en un gesto de respeto democrático, felicitó a Milei y afirmó: “Desde mañana la responsabilidad de dar certezas es de Milei”.
Milei enfrenta desafíos en su presidencia electa
Con la responsabilidad de liderar el país a partir del 10 de diciembre, Milei deberá articular un equipo, un discurso y un plan de acción. Su victoria se consolidó en diversas regiones del país, incluyendo Córdoba, Mendoza, y provincias del sur y norte, donde La Libertad Avanza logró desafiar la hegemonía histórica del PJ.
La Libertad Avanza, a pesar de no contar con gobernadores propios, tiene presencia en el Congreso con ocho senadores nacionales y 38 diputados. La victoria de Milei abre un período de incertidumbre, especialmente debido a las polémicas propuestas de campaña, como la dolarización de la economía y cuestionamientos a acuerdos democráticos.
Participación electoral y denuncias en la jornada decisiva
A pesar de tratarse de un fin de semana largo, la participación electoral fue similar e incluso podría superar ligeramente la registrada en las elecciones generales. La jornada estuvo marcada por la tensión y denuncias cruzadas sobre el robo o rotura de boletas, y la palabra "fraude" instalada por los libertarios generó controversia sin evidencias.
Guillermo Francos, asesor de La Libertad Avanza, calificó la elección como "transparente" y desestimó las denuncias de Karina Milei y Santiago Viola, los apoderados partidarios, sobre posibles irregularidades. Con el triunfo de Milei, Argentina se enfrenta a un escenario político y social lleno de incógnitas, sin mayoría en el Congreso y con divisiones evidentes en la sociedad.