Miguel Borja metió su primer gol en un Superclásico el domingo y mientras sus compañeros estaban en medio de una batalla campal, el festejaba con una remera que decía “La Gloria es para Dios”. ¿Quién es este colombiano que hace menos de 1 año arribó al equipo de Núñez?.
El Superclásico vivido este domingo tuvo como actor principal a la pelea que se generó luego del gol de River Plate, donde tuvieron que intervenir parte de la jefatura policial. Sin embargo, uno de los hechos que resultó interesante es que, mientras esta pelea se llevaba a cabo a flor de piel, Miguel Borja estaba festejando del lado de las tribunas su primer gol en un Superclásico, arrodillado, con sus dedos apuntando al cielo y poniéndose una remera con el lema “La Gloria es para Dios”. Para entender cómo llegó a este punto de su carrera que parece estar en su auge, hay que repasar lo que fue su carrera desde sus inicios en Cali, su breve paso por el futbol argentino y su polémica hace 2 años contra Argentina en la Copa América.
Miguel Borja empezó su carrera profesional en Deportivo Cali en el año 2011, aunque recién metería sus primeros goles en el equipo Cortuluá, cuando el club colombiano se encontraba en segunda división. Sus buenas actuaciones lo llevarían a ser fichado por el Livorno de Italia, pero es en este punto donde el futbolista, por diferentes motivos, empezaría a ser prestado a varios clubes entre los que se incluye Olimpo de Bahia Blanca, donde jugó un año en el equipo donde en aquel entonces era dirigido por Walter Perazzo. Su primer gran logro como futbolista lo haría en Atlético Nacional, donde saldría campeón de la Copa Libertadores 2016 metiendo 4 goles entre semifinales y la final contra Independiente del Valle.
Su explosión goleadora llegaría en 2017, cuando fue fichado por el Palmeiras de Brasil. Convirtió más de 30 goles en dos años, incluyendo 9 goles en la Copa Libertadores 2018 donde el equipo brasileño llegaría a semifinales pero sería eliminado por Boca Juniors. A partir del 2020 sería contratado por el Junior de Barranquilla, siendo esta su vuelta a su tierra natal y siendo una de las figuras del equipo.
En cuanto a nivel selección, tuvo un gran paso por la sub-20 de su país, pero a nivel mayores nunca relució demasiado, y más sabiendo que en su puesto había delanteros como Falcao, Teófilo Gutiérrez o Carlos Bacca. Sin embargo, tuvo la oportunidad de jugar la Copa América 2021 siendo casi siempre titular o primer cambio. La polémica llegó en las semifinales contra Argentina, donde en la tanda de penales tuvo un encuentro de palabras con el arquero Emiliano Martinez y, luego de convertir su penla, festejaría soltando un grito y haciendo su característico festejo del “Colibrí”. Meses después, declararía que “lo va a llenar de goles al Dibu” en lo que sería su encuentro por Eliminatorias, aunque no podría cumplir su promesa.
Luego de varias idas y vueltas, donde hasta Boca quiso tenerlo en sus filas, sería contratado por River Plate en julio del año pasado, siendo un 9 de jerarquía para el equipo en ese entonces dirigido por Marcelo Gallardo y que necesitaba un delantero top luego de la partida de Julian Alvarez. Metería 9 goles en su primer año, y en el 2023 siempre que tiene la oportunidad convierte, aún cuando es usado de manera irregular por el técnico Martín Demichelis.
Lo que caracteriza la carrera de Borja, además de los goles, es su constancia y su Fe en Dios. Se considera una persona muy creyente y siempre en sus declaraciones le da gracias a Dios. Hace casi 1 año que asiste a una iglesia cristiana ubicada en Villa Madero llamada La Cruz Buenos Aires, y se lo ve en varias historias de Instagram junto a su pastor Ale Gomez, creador del Jesus Fest (evento que reúne más de 100.000 personas). Dentro de todas las polémicas ocurridas el domingo pasado, es notirio ver como el futbolista decidía dedicarle un momento a sus hinchas y a Dios para celebrar con ellos, mientras a unos pocos metros sus compañeros se sumergían en una batalla campal. ¿Será este un nuevo punto en su carrera donde parece no haber límites? Solo Dios sabrá.