La histórica entrevista de 1995 entre la princesa Diana y el periodista Martin Bashir sigue dando de qué hablar, ahora con la liberación de más de 3.000 correos electrónicos entre directivos de la BBC y el controvertido comunicador. La entrevista, que atrajo a 23 millones de espectadores en el programa Panorama, se ha visto empañada por acusaciones de métodos fraudulentos para conseguirla.
El escándalo se desató después de que se revelara que Bashir utilizó chantajes, mentiras y documentos falsos para persuadir a Lady Di de participar en la entrevista. El documental de 2020, "The Diana Interview: Revenge of a Princess", detalló las tácticas engañosas del periodista, llevando a una investigación más profunda.
Los correos electrónicos compartidos revelan conversaciones entre Bashir y los directivos de la BBC en 2020, cuando se destapó el escándalo. Andy Webb, periodista de investigación, logró obtener acceso a estos correos, lo que ha generado nuevas preguntas sobre el conocimiento de la cadena británica respecto a las prácticas de Bashir.
En medio de las acusaciones, Bashir, en uno de los correos electrónicos, escribió: "Lamento oír que esta supuesta historia de ‘falsificación’ ha vuelto a surgir. Esto no tuvo nada que ver con conseguir la entrevista, pero permitió que los celos profesionales se colgaran la medalla ante supuestas irregularidades". Además, señaló la incomodidad dentro de la empresa por su origen étnico y social, expresando: "Hubiera sido mucho más fácil si una de las familias dinásticas lo hubiera hecho".
El periodista Andy Webb sostiene que los correos muestran un posible encubrimiento por parte de la BBC. "La BBC admite claramente que se estaban reteniendo documentos. En mi opinión, eso es un encubrimiento. Y es obvio, incluso a primera vista, que este material es muy relevante, aunque la BBC aseguró ante el juez que era completamente irrelevante", afirmó Webb.
Estas nuevas revelaciones plantean preguntas sobre la responsabilidad de la BBC en el escándalo de la entrevista, sugiriendo que Bashir no sería el único responsable de los métodos cuestionables utilizados para obtener la primicia. La polémica que rodea a la "entrevista del siglo" de Lady Di parece estar lejos de resolverse.