El ejército del país norafricano se encuentra, por tercer día consecutivo, librando combates sangrientos ante el grupo de milicias paramilitares conocido cómo Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), ambos protagonistas de la alianza con la que provocaron el golpe de Estado en el año 2021.
Los combates que se dieron en el país, resultado de una contienda por la lucha de poder, han dejado un monto de más de 100 muertos y 1.100 heridos. Durante la jornada se registraron fuertes enfrentamientos con aviones, vehículos blindados y camiones con ametralladoras montadas en la capital de Jartum.
Para encontrar el motivo de estos violentos enfrentamientos hay que recordar que desde el golpe de Estado que ocurrió en octubre de 2021, Sudán ha sido gobernado por un consejo de generales, en los cuales, el general Abdel Fattah al-Burhan (jefe de las fuerzas armadas y presidente del país) y el general Mohamed Hamdan Dagalo (Lider de la RSF) se encuentran en el centro de la disputa.
Los generales se encuentran en un desacuerdo sobre una propuesta realizada para la transición hacia un gobierno civil, esto desencadeno en que miembros de la RSF hayan sido redistribuidos por Sudán, medida que fue tomada como amenaza por el ejercito y que desató en este enfrentamiento. Actualmente, el país se encuentra en un estado de tregua por 24 horas luego de una conversación con el secretario de estado de los EE.UU. con el alcance de otras naciones amigas que también pidieron un alto el fuego temporal.
La presión diplomática para frenar el conflicto progresa de forma desesperada para encontrar la manera de lograr que ambos generales establezcan un diálogo y que la guerra no siga sumando víctimas.