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Por CABRERA, KATHERINE ELIZABETH

Estudiante de Los de Roman y los del Mago Capria comienzan a disputarse por un lugar en la semifinal.

Sofía Franks tiene 23 años y es de aries. Es actriz, cantante, bailarina y creadora de contenido en redes sociales. Actualmente cuenta con 118 mil seguidores en Tiktok y todos los días el número va en ascenso. Allí, ella desarrolla su destreza artística con una serie de videos tipo novela, con los que parodia a los clásicos fanfictions de la época de 2014 en adelante.

 

¿Cómo es un día siendo influencer?

La verdad es que mis días son todos diferentes. Son bastante caóticos. En general trato de ver qué contenido tengo que subir a las redes. El contenido que subo a las redes lo tengo cronogramado, se podría decir: tal día escribo, tal día grabo, tal día edito o si puedo edito en momentos libres. También tomo clases, así que trato de cursar, editar, grabar, guionar, vivir en el medio y seguir con otros trabajos. Siempre haciendo contenido, todo el día, todos los días.

 

¿Por qué quisiste ser actriz?

Honestamente, no sé. Siempre fui muy tímida, desde chiquita. También sufrí mucho bullying, así que siento que en la actuación encontré un lugar para expresarme y poder ser quien quería ser. Por más cliché que suene, con arte pude expresar todo lo que me pasaba. Es muy divertido: poder experimentar muchas emociones y vivir muchas vidas sin tener que vivirlas de verdad, sin tener que lidiar con eso en la realidad. El ambiente es muy divertido, las personas son muy interesantes y tiene esto que es la adrenalina. Siento que uno cuando es actor vive todo el tiempo con adrenalina; para lo bueno y para lo malo, y eso es increíble.

 

¿Cómo fue tu primer acercamiento al arte?

Arranqué a los cuatro años, de casualidad. Pusieron una escuela de teatro musical en frente de mi casa (muy conveniente para la trama), y fue muy natural. Entonces, para mí, toda la infancia fue como un hobby, era como algo que solo hacía después del colegio. Cuando fui creciendo, en la adolescencia, fui buscando mi identidad. Dije: “Ah, bueno, yo soy esto. Yo soy arte. Yo soy música. Yo soy teatro. Yo soy todo esto”. Se convirtió en una forma de encarar la vida, se podría decir, y lo que quisiera hacer para toda la vida.

 

¿En qué proyecto estás trabajando actualmente?

Soy parte de “Shrek el musical” en el Teatro Maipo. Es una mega producción, un musical hermoso. Es mi primer trabajo comercial, ya que vengo haciendo teatro independiente hace varios años; esta vendría a ser como mi primera mega producción. En realidad llegué ahí porque en 2019 The Stage Company hizo un taller de montaje y yo participé. Había hecho el rol de Fiona, que es la protagonista, y después seguí en contacto con ellos durante la pandemia, participando en algunos concursos. Quedé en sus memorias y ya para el año pasado (que se hizo un reestreno) me convocaron directamente para hacer el cover de Fiona, porque yo ya me sabía el personaje, y para formar parte del ensamble en todas las funciones.

Siento que es el sueño de cualquier intérprete de teatro musical, fan de los musicales, de cualquier actor. Tengo que ser súper profesional pero por suerte es un ambiente muy lindo, adrenalínico y divertido, así que lo disfruto muchísimo.

 

¿Cómo empezaste teatro independiente?

Empecé en la última escuela a la que fui, creo que eso fue lo primero que hice (porque antes he hecho otras cosas más caseras, como con la Municipalidad de acá, La Plata). Pero así como teatro independiente de “somos una cooperativa sin producción, vamos a poner plata y nos vamos a poner la obra al hombro” fue una obra que se llamaba “Automáticos”, dirigida por un profesor mío. Como yo era una alumna muy aplicada y ya tenía muchas ganas de trabajar, me sumó e hicimos algunas funciones. Después seguí haciendo infantiles, como El Mago de Oz, y lo último que hice independiente fue mi tesis de la facultad. La obra fue “Salvajes a la hora del té” y la entrenamos el año pasado, hicimos una temporada de varias funciones.

 

¿Qué piensa tu familia de tu carrera?

Es muy gracioso, porque en mi familia son todos ingenieros ingenieros. Civiles, industriales, todos ingenieros. A mi familia no le gustó ni un poquito, más que nada el hecho de tener que estar viajando constantemente a Buenos Aires. Vivo en La Plata y si quiero ir a trabajar allá tengo que viajar todos los días, al principio, eso no le gustaba. No les parecía el ambiente y estaba también el tema de la frustración, porque hay muy pocos que lo logran. Pero con el tiempo y viendo que no me estaba yendo tan mal, que estaba encaminada y que sabía lo que estaba haciendo fueron aceptándolo. Hoy me apoyan, me llevan a los castings, a las funciones, me esperan, me van a ver todo el tiempo. Tengo unos padres que me bancan en todo esto del arte.

 

¿Hacia dónde apuntas como actriz?

Qué difícil. Me encanta el teatro musical, es mi cuna, de ahí vengo, de ahí nací. Es lo que más me apasiona. Pero también sueño con estar en películas o en series, como en Netflix, Disney, en súper producciones. Un poco de las dos cosas. Me gusta mucho el teatro y me gusta mucho lo audiovisual, así que un poco de ambas. Quiero un balance. En un futuro me veo siempre involucrada en la comunidad de la actuación argentina, o quizá también en la internacional.

 

¿Cómo se te ocurrió tu primer vídeo viral, el del personaje de “rayita”?

Fue muy loco, porque venía teniendo un bloqueo. Le estoy metiendo a las redes desde la pandemia y siempre tenía vídeos virales, pero nunca lograba tener un contenido estable. Justo unos días antes del video me había juntado con un amigo porque no sabía qué hacer, le dije: “Creo que voy a dejar las redes”. Esa misma semana se puso viral un filtro del 2014 (se llamaba “2014”, literal) y dije: “¡Es mi época, es mi adolescencia!”. Pensé en agarrar el filtro, que estaba en tendencia, y el formato Arréglate conmigo, que está plagando Tiktok todos los días, y hacer un “Get ready with me pero estamos en 2014”. A ese vídeo le fue muy bien y alguien me había comentado: “Re novela de Wattpad” y ahí dije listo. Aparte yo escribía novelas en Facebook, entonces para mí era mi momento de brillar.

 

¿Alguna vez pensaste en dedicarte a la escritura?

Lo pensé a futuro, porque ahora tengo muchos proyectos actorales primero. Yo soy de esas personas que quiere hacerlo todo: quiere ser actriz, quiere ser Influencer, quiere ser cantante, quiere ser escritora, quiere hacer cine… Sí, en un futuro me encantaría escribir algún libro, no sé si de ficción o qué, pero sí. Me encanta escribir.

 

¿De dónde sacás la inspiración para la serie de videos tipo novela que hacés?

No quiero sonar como una persona egocéntrica o soberbia, pero tengo muchas ideas. Soy una persona muy creativa. En la adolescencia pasé mucho tiempo leyendo, viendo películas, series en internet; tengo mucha información en la cabeza y tengo mucha creatividad, entonces esas cosas convergen y surgen. También las personas que me siguen me comentan cosas y me incentivan, tampoco es todo mío. En general cuando no tengo inspiración lo dejo. Si no estoy inspirada no escribo, me distraigo. Hago otras cosas, la inspiración en algún momento va a llegar. Es como una lamparita que se prende y se apaga. A veces pienso que lo que escribo no está bueno pero después a la gente le gusta. Es dejarlo fluir, uno tampoco puede estar inspirado todo el tiempo.

 

¿Los videos los editás vos?

Sí, es un re laburo. Gracias a la pandemia edito muy rápido, porque los trabajos de la facultad tenía que editar yo, así que tengo mucha cancha en eso. Quizás es un poco tedioso, pero es divertido. Yo me río cuando veo los videos y cuando me río creo que va a funcionar. Lo más difícil es buscar el meme perfecto para el momento, que cause gracia y que sea el timing. Pero es mi humor y sé que es el humor que también les gusta a las personas que me siguen. Es tedioso y difícil, a veces no tengo ganas de editarlo y me gustaría que otra persona lo edite por mí, pero es imposible porque es mi cabeza y yo sé cómo funciona.

 

¿Cuál fue tu reacción cuando viste que el vídeo se hizo viral?

Me agarré la cabeza. Dije “no puedes ser”. Primero sentí terror, porque cada vez que un video mío se hacía viral primero tenía buenos comentarios pero después se llenaba de hate, entonces me asusté. Cuando vi que generó tanta alegría y nostalgia en otras personas me puse muy contenta. Fue muy personal y fue muy lindo que a tanta gente le haya gustado y que lo hayan compartido por todos lados.

 

¿Cómo lidias con el odio que llega por las redes sociales?

La verdad, ahora no estoy experimentando mucho hate, por suerte. Como este contenido que estoy subiendo es para gente muy particular, las personas que me vienen a tirar odio simplemente no lo entienden y lo pasan de largo, que es lo que debería pasar con todo. Pero en otros momentos me ha pegado muy fuerte. Me acuerdo que en vacaciones del año pasado se me había hecho viral un vídeo muy tonto e inocente, de verdad no decía nada malo ni insultaba a nadie. Estaba molestando a mi familia en la costa y se había hecho viral en Instagram. La cantidad de mensajes que llegaron sobre mi apariencia, que parecía más vieja, que mi personalidad… Incluso mensajes directos hacia mí, bardeándome, me tiró mucho para atrás. Creo que ahí pensé en dejar las redes. Yo no lo podía soportar. Es difícil lidiar con el hate porque a veces te toca una fibra muy personal, que el otro no sabe, y hay que estar muy preparado no tomárselo personal, porque es una persona frustrada, que está del otro lado y le encantaría estar haciendo lo que estás haciendo vos o por lo menos animarse.

 

Empezaste a actuar desde chica, ¿cómo fue el camino hasta llegar a dónde estás ahora?

De verdad yo era muy tímida. Al punto de que nunca me daban un protagónico porque creían que no lo podía hacer. Mis profesores decían que ese día íbamos a cantar solos y yo iba al baño para esconderme ahí. Siempre me dio mucho miedo. Hubo un momento que dejé de ir a mis clases de teatro musical y me agarró un momento muy triste en el que dije “no tengo nada”. Estaba viviendo situaciones de bullying, no tenía nada que me hiciera feliz. Pensé “¿qué es lo que a mí me hace feliz? El arte”. Más allá del miedo que me da, logré ir a otra escuela donde me contuvieron y me demostraron que sí podía. Que sí podía cantar, que sí podía actuar, que podía bailar, que era algo que yo podía hacer. Y me obsesioné.

Con los años, al ir creciendo y entendiendo un poco la vida, también teniendo escenario y con personas atrás que me alentaron se fue yendo la timidez. Fue como una neblina que se iba disipando. Quizás cuando estoy por encargar algo nuevo, puedo llegar a ser un poco tímida pero ya no es como cuando era chiquita que me iba al baño a llorar porque no quería cantar.

 

Los artistas tienen que tener una formación constante. Sofi es licenciada en Artes Escénicas, pero nos contó que sigue formándose en distintas áreas para ser más polifacética y sumar herramientas a su trabajo. Ella transitó un largo viaje lleno de baches para llegar a ser la influencer que es hoy. Sin duda, su futuro es prometedor. La podés encontrar como SofiFranks en Tiktok, si querés conocer más de su contenido.

 

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