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El pasado 24 de marzo se conmemoraron 46 años del golpe cívico-militar de 1976, época en la cual numerosos cantantes y bandas fueron censuradas. A partir de esto, entrevistamos a Claudio Eduardo Spisso, quien vivió su adolescencia durante este oscuro período, para que nos cuente acerca de qué le sucedió a la música y cómo se sentía ir a recitales por aquella época.

Claudio Eduardo Spisso tenía tan solo 12 años de edad cuando los militares llegaron al poder el 24 de marzo de 1976. Conforme fue creciendo, comenzó a notar que en el país se vivía con miedo y preocupación debido a las desapariciones, atentados, secuestros de bebés, etc. Incluso contó que los militares siempre controlaban: “A mí una vuelta por estar reunido en un parque una noche con un grupo de amigos de la secundaria, se nos acercó la policía para pedirnos los documentos. Cada grupo que veían para ellos les resultaba sospechoso y pensaban que eran subversivos”

Claudio mencionó también que, en 1983, un año después de la guerra de Malvinas, tuvo que realizar el servicio militar en Río Gallegos. “Me acuerdo como los militares nos decían que la guerra no terminó y que nosotros íbamos a ser los próximos en ir a pelear” dijo con un tono de indignación. Otra anécdota que relató fue acerca del famoso mundial de fútbol de 1978: “Lo paradójico era que mientras todos festejaban el campeonato mundial y los partidos de Argentina, en el mismo momento habían desaparecidos, secuestros, etc.”

Claudio creció escuchando rock nacional. Entre los artistas que admiraba se encontraba Charly García, Luis Alberto Spinetta, León Gieco, Pappo, Serú Girán, Fito Páez, Juan Carlos Baglietto, entre muchos otros. Al preguntarle si alguna de las bandas o artistas que escuchaba durante su juventud estuvieron censurados durante la dictadura, afirmó que efectivamente todos estaban censurados de una forma u otra. 

A partir de esto, comenzó a recordar canciones que habían salido por aquella época que hacían alusión a la dictadura: “Me acuerdo del famoso tema de Charly García “No bombardeen Buenos Aires” el cual era como una sátira por la guerra de Malvinas. Hay otra que salió después, post dictadura, llamada “Demoliendo hoteles”. Hay una parte muy buena que dice “Mientras los plomos juntan los cables, cazan rehenes”Era muy loco lo que decía Charly García, pero era verdad” relató el entrevistado mientras soltaba una carcajada. También mencionó la icónica canción de Serú Girán “Canción de Alicia en el país”, conocida por su ingeniosa forma de evitar la censura al utilizar metáforas acerca del cuento infantil “Alicia en el país de las maravillas” para repudiar la dictadura. 

En relación a los recitales que se realizaron durante la dictadura. Claudio contó que asistió a una innumerable cantidad de conciertos y que, en ellos, había cantos en contra de los militares. Uno de los más recordados según el entrevistado era el de “paredón paredón a todos los milicos que vendieron la nación”“El tema de ir a recitales de rock era como que la gente se expresaba y se liberaba” manifestó. A su vez, mencionó que la principal diferencia entre los conciertos de hoy en día con los que se realizaban en aquel entonces era el hecho de que había que tener cuidado al momento de ir a uno ya que los tumultos y aglomeraciones no estaban bien vistas. En cambio, actualmente “eso ya no pasa, no existe” afirmó el entrevistado. 

Con una sonrisa en su cara, el entrevistado comenzó a relatar acerca de su recital favorito de aquella época: “Fui a muchos conciertos, pero el más importante lejos en esa época fue el de Queen. Fue en el año 81 en Vélez. Me acuerdo perfectamente que ese fue el recital más importante que hubo a nivel internacional acá en Argentina. Queen fue lo que marcó el inicio de todos esos recitales internacionales en el país. Lo fui a ver en una de las primeras presentaciones de las 5 que hicieron. Fue una cosa increíble porque nunca en mi vida había visto un show internacional con todo lo que implicaba que nada que ver con lo que era la producción local en cuanto a todo: escenografía, luces, puesta en escena, sonido, etc. Me acuerdo que lo hicieron subir a Maradona al escenario también. Era también una particularidad como eran ingleses y siempre hubo una rivalidad (haciendo referencia a la rivalidad entre Inglaterra y Argentina)”

Para finalizar la entrevista, se le preguntó si podía dar una breve reflexión a lo cual respondió: “Lo que opino de esa época militar es que nadie estuvo de acuerdo con todo lo que pasó por los métodos que utilizaron. Esperemos que nunca más suceda. Y mezclado un poco eso con el tema de la música, por suerte hoy no está censurada para nada y es lo más lindo que hay poder ver cualquier artista internacional”

En resumen, a pesar de la fuerte censura, el rock nacional jamás murió. Podría decirse que se reinventó: comenzó a utilizarse como una forma de protesta poética mediante el uso de ingeniosas metáforas y alegorías para repudiar la dictadura. 

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