Adrián Continello falleció el lunes 1 de abril de 2019 en el derrumbe de un edificio, lindero a una obra en construcción de la calle pavón 3078, San Cristóbal. En la planta baja funcionaba un supermercado y en la planta alta vivía Adrián con su pareja, Mercedes, y su cuñada. El joven de 32 años iba a casarse en agosto de este año.
No fue un terremoto, o un desastre natural, el derrumbe se provocó por la excavadora utilizada por la constructora Lybster S.A, cuyos dueños son Flavio y Hugo Caputo, hermanos del ex ministro de finanzas del actual gobierno, Luis Caputo.
Los dueños del supermercado que estaba en planta baja y los demás vecinos habían llamado varias veces al 147 para denunciar que sentían mucho movimiento: “toda la casa temblaba”, explicó la novia de Adrián. Hubo quejas, pedidos de que “por favor pararan” y denuncias de parte de Adrián y otros vecinos, pero la respuesta siempre fue la misma, que todo era normal, y que estaba todo en regla.
Según cuentan sus familiares el joven dormía en su cama, disfrutando de su día franco en el trabajo, cuando sintió el estruendo y se abalanzó sobre sus perros para protegerlos. Los mismos sobrevivieron al terrible derrumbe, pero el joven sonidista de la TV publica no logró salir con vida. Dotaciones de bomberos intentaron rescatarlo durante horas, pero no lograron sacarlo de los escombros.
La obra en construcción ya tenía denuncias previas(realizadas por la UOCRA y vecinos)por irregularidades. Su familia sigue esperando por una justicia que parece no llegar nunca. Según las pericias excavaron 17 metros de largo, 4 metros de profundidad sin realizar la submuración y esto fue lo que provocó el derrumbe.
l hermano del joven fallecido, Esteban Continiello, explicó que un segundo reclamo es que “nos permitan retirar las pertenencias de Adri”, expuestas a la intemperie y “echándose a perder” en el lugar de los hechos, elementos que “no hacen a la causa” y que en poder de sus padres “les permitiría elaborar mejor el duelo”. “En cambio, al grupo Mitre le dejaron sacar la retro excavadora que fue el instrumento que se usó para matar a mi hermano, y que debería estar secuestrada y no siendo usada para seguir facturando”, dijo.
Continiello, cuya familia es una de las tres querellas en la causa, denunció que las pericias, que describió como “básicamente, la remoción de escombros”, se iniciaron “tres meses después del derrumbe” y, a poco de empezar, “se detuvieron por un pedido absurdo de la defensa”, con la consecuencia de que “la investigación no avanzó nada”.
La causa está caratulada como homicidio culposo y recayó en el juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Número 9. El único imputado hasta el momento es Eduardo Agustín Aguaviva, director y autor del proyecto de obra. Pero, adems, empleado jerárquico de la Constructora Caputo Hermanos S.A.
