Hindú vs Jockey: el Elefante se consagró campeón en la final del Nacional de Clubes

La tarde en Don Torcuato preparaba el clima perfecto, para la final del torneo más importante a nivel de clubes del país. Lejos habían quedado las lluvias y nubes grises que habían copado el cielo la mañana de ese sábado. El sol se levantaba imponente y fuerte, todo parecía ser clima de fiesta en las calles,que ya se teñían de los colores del club, amarillo y azul por todos lados y carteles que rezaban ¡Vamos Torcuato!. En el aire ya se escuchaban los cánticos de aliento, en el club el equipo concentraba y su hinchada como en una especie de ritual se reunía y preparaba para el encuentro.

Desde Rosario se formó toda una peregrinación a Buenos Aires , unas 1500 personas viajaron 2 horas y media para alentar a su equipo. Hacía 22 años que no se repetía este encuentro en una final, aquel 22 de noviembre de 1997 fue Hindú el que cayó por 24 a 14 en el estadio de Biei. Desde entonces el equipo rosarino no pudo repetir la hazaña. Por otro lado Hindú mantuvo el titulo de campeón desde el 2014 durante 4 años consecutivos y con este buscaba convertirse en pentacampeón.

Eran las 16:30 y las tribunas ya estaban colmadas por las respectivas hinchadas, todo era cantos y emoción. Jockey hizo su entrada en la cancha seguido por Hindú y todos vitorearon. El arbitro, Federico Anselmi, chequeo su reloj que marcaba las 16:40, sonó su silbato y el kick off abrió el partido. La primera mitad fue lenta, ambos equipos defendían rigurosamente y ninguno lograba alcanzar el ingoal contrario, los rosarinos se excedían en la disciplina y los de Torcuato supieron aprovecharlo. El arbitro declaró penal a favor de Hindú provocado por el scrum, el encargado de patear a los palos sería su apertura y capitán, Santiago Fernández. El silencio se apoderó de toda la cancha, Fernández se posicionó y pateó sin titubeos. No había una brisa en el aire y la pelota cruzó la gran H sin problemas, Hindú habría el marcador 3-0.

Los jugadores de Jockey salieron más vehementes, pero la defensa del local seguía siendo solida, los rosarinos seguían cometiendo errores, lo que costó dos tarjetas amarillas, Manuel De Marco y Agustin Orsi tuvieron que retirarse de la cancha por el resto del primer tiempo. El try esperado por ambos equipos nunca llegó pero Hindú se siguió apoyando en la efectividad de Fernández que tuvo la oportunidad de patear 3 penales más, por su lado Jockey pudo borrar el 0 en el marcador por el mismo camino, Juan Albertengo supo aprovechar el penal a favor de su equipo y convirtió pateando a los palos. Así se terminó la primera parte del partido con el marcador 12-3.

El segundo tiempo arrancó un poco más dinámico, Hindú salió a buscar el try tras un scrum, utilizando una combinación de pases en una jugada excelente, el full back Belisaro Agulla alcanzó el ingoal, todó el club estalló en festejos, sin embargo solicitaron al arbitro que revisara una jugada anterior al try. En las cámaras se podía ver como el tercera línea, Tomas Resnick, golpeaba en lo que parecía ser un accidente a un jugador de Jockey en la cara. Automáticamente el arbitro anulo la jugada y blandió la tarjeta roja expulsando al jugador de Hindú. Ahora el Elefante se veía en apuros, restaba casi todo el segundo tiempo y tenían que jugar con uno menos,la preocupación se hacia presente en las caras del cuerpo técnico que no paraba de dar indicaciones a los jugadores para que pudieran llenar el hueco que se había formado. Otro penal llegó para los de Don Torcuato que volvieron a sumar 3 puntos, Jockey provocó un penal a su favor a los 14′ y el encargado de patear fue Ignacio Dogliani que convirtió sin problemas. Parecía que Jockey empezaba a tener un respiro achicando la brecha cuando el arbitro marcó otro penal a favor de Torcuato, Fernández que no había desperdiciado un solo tiro esa tarde sumaba 3 más, Hindú volvía a tener la diferencia de 12.

El nerviosismo en los rosarinos fue aumentando a medida que transcurrían los minutos pero el cansancio en los jugadores del equipo contrario empezó a hacerse notar tras una jornada de defensa intensa, Jockey decidido a descontar utilizó algunos penales a favor y empezó a aplicar el juego corto para acercase al ingoal contrario. Ya se cumplían 34′ del segundo tiempo cuando Patricio Boranio decidió jugar rápido un penal y apoyó la pelota bajo los palos de Hindú. Jockey había alcanzado el tan ansiado try, Ignacio Dogliani se encargó de la conversión y el marcador quedaba en 18-13, pero ya no había tiempo para más y el silbato anunció el final del partido.

Todo Hindú gritó campeón, sus entrenadores Francisco Fernández Miranda, Lucas Ostiglia y Juan Ignacio Gauthier explotaron en abrazos y felicitaciones.La estirpe del Elefante demostró una vez más que este torneo parece hecho a su medida. Su vigésimo título desde 1996 a la fecha entre torneos URBA y UAR, la mitad (10) son del Nacional de Clubes: 1996, 2001, 2003, 2005, 2010, 2015, 2016, 2017,2018 y 2019. Don Torcuato cerró un torneo perfecto en su casa, se mantuvo invicto en los 6 partidos, salió primero de su grupo y derrotó al campeón del Torneo del Interior antes de pasar a semifinales. Todo eran merecidos festejos en la cancha, habían obtenido la revancha de aquella final que Jockey se había quedado en el 97,el sol bajaba detrás de las tribunas y los jugadores se preparaban para levantar por quinta vez consecutiva la radiante copa del Nacional de Clubes.